Conoce las 5 características que las universidades buscan hoy en día y que el Bachillerato Internacional (IB) fomenta en las alumnas de Alegra.
1. Alumnos motivados
Las universidades buscan estudiantes motivados y proactivos, que demuestren sobre todo su interés por el estudio, personas que sigan sus intereses y quieran iniciar su carrera profesional con una ambición mayor que el simple hecho de obtener un título.
Uno de los principales ejes de desarrollo del Programa del Diploma del IB es que las alumnas desarrollen habilidades como son la autogestión, investigación, autonomía, comunicación y habilidades de pensamiento, siendo éstas habilidades clave para el desarrollo de los perfiles más buscados por los empleadores en la actualidad. Es por ello que las mejores universidades de España y de todo el mundo reconocen en los alumnos del IB la preparación en habilidades y herramientas para el estudio universitario que aumentan el prestigio de dichas instituciones siendo una referencia de gran importancia para el ingreso a las universidades.
2. Mentalidad internacional
La mentalidad internacional de quienes se han educado en el sistema IB, brinda a las universidades un ingrediente de innovación y de globalidad muy deseado actualmente por las distintas instituciones
de educación superior. Implica para la universidad una calidad académica mayor ya que amplía y eleva las exigencias con respecto a sus estudiantes y profesores. “Las universidades están apostando, en un mundo globalizado como el de hoy, a la internacionalización” y por tanto los alumnos IB son muy estimados en la comunidad universitaria.
La mentalidad internacional brinda a las alumnas la posibilidad de comprender que existen diferencias entre culturas, visiones y perspectivas sobre temas comunes a todos los seres humanos y el valor de este reconocimiento se refleja en la interpretación y entendimiento del mundo de una forma más amplia con pensamiento crítico que a su vez valora la riqueza que esta diversidad aporta a la conformación de un mundo en el que convivir es un tema de respeto y entendimiento.
3. Calidad académica
El rigor con el que se prepara a las estudiantes durante sus estudios en el Bachillerato Internacional, las prepara efectivamente para su desempeño en la Universidad. Existen distintos estudios respecto a los resultados obtenidos por parte de estudiantes del IB frente al resto de los graduados de la misma edad, y lo reflejado en esos estudios confirman que la formación recibida durante los años de estudio bajo la metodología IB han preparado a los alumnos para destacar durante sus estudios universitarios.
Esto se debe principalmente al carácter indagador, reflexivo y de fomento a la investigación que compone el IB. Razón por la cual los estudiantes del IB son tan bien recibidos en la comunidad universitaria.
4. Competencias para la vida
Otro motivo de interés por parte de las universidades en los estudiantes graduados del IB, es el hecho de que están formados en base a competencias para la vida, más allá de la memorización de conceptos durante su etapa de Secundaria y Bachillerato. Un ejemplo de esto es la capacidad de trabajo en equipo que tienen quienes se gradúan en el IB, por la misma metodología que les prepara y anima a colaborar y enriquecer con su perspectiva los distintos trabajos grupales que se conforman en clase.
En los programas del Bachillerato Internacional lo más enriquecedor es que las alumnas, a través de la autonomía y la curiosidad, se convierten en personas ávidas de conocimiento y que continuarán aprendiendo durante toda su vida, reconociendo que los cambios cada vez más vertiginosos, presentan escenarios de actualización y desarrollo constante.
5. Más allá del aula
Las habilidades comunicativas que desarrolla el IB y que pone a disposición del servicio de los demás, con componentes metodológicos como CAS (Creatividad, Acción y Servicio), agregan un matiz a la educación y a la formación completa de los alumnos que atrae a las universidades que buscan futuros alumnos comprometidos no sólo con el propio desarrollo profesional, sino con contribuir a una comunidad universitaria que vea más allá del aula de clases y sea capaz de “derramarse” en la sociedad. Cada vez son más las instituciones educativas que buscan crecer en programas de responsabilidad social y que animan a sus estudiantes a abrirse al mundo y emprender proyectos que logren una mejora en su entorno.
Una de las fortalezas de los programas del IB es la formación integral del alumno desarrollando en ellos los atributos del perfil de la comunidad de aprendizaje como son ser pensadores, íntegros, solidarios, equilibrados, de mentalidad abierta, buenos comunicadores, informados e instruidos, reflexivos e indagadores. En este marco referencial de crecimiento personal, los componentes troncales de los programas tienen requisitos como son el desarrollo del pensamiento a través de Teoría del Conocimiento y Creatividad, Actividad y Servicio (CAS) que aportan a los alumnos una manera diferente de plantearse el conocimiento en sí, y a descubrir las necesidades de la comunidad que los rodea desde lo local hasta lo global y en las posibilidades de actuar en estos entornos con acciones concretas que repercuten tanto en las comunidades como en ellos mismos. Esto sólo es posible cuando el aprendizaje va más allá del aula de clase.