
Febrero, 2021
Autodominio en niños
El autodominio es la capacidad del carácter de quien domina los impulsos propios de su forma de ser. El objetivo de dominar los impulsos depende de cada persona, usualmente es lograr una meta concreta o hacer la vida más amable a los demás. No es una virtud en sí misma, sin embargo vale la pena reflexionar sobre ella, porque es una habilidad indispensable para sentar las bases del desarrollo de otras virtudes: la templanza, la fortaleza, la caridad, la sobriedad, la austeridad…
El autodominio ayuda también a enfrentar los miedos que produce el plantearse un nuevo reto, es la habilidad que nos recuerda que las sinfonías, las obras de arte, o los grandes libros no se hicieron en un día, requieren disciplina constancia y la capacidad de entregar nuestro tiempo al servicio de algo más grande.
La falta de autodominio suele tener manifestaciones muy típicas: el deseo constante de ser el centro de las miradas, buscar que las conversaciones giren entorno a lo que uno quiere, presumir, compararse con los demás… Por eso, ayudar ahora a que nuestras hijas conquisten el dominio de sí mismas es también un camino para que sean más sencillas, mujeres con paso firme y voluntad recia.
Lo más importante del autocontrol es que nos permite demostrar nuestro amor a pesar de cualquier situación o contexto, independientemente de los gustos o de las inclinaciones del momento, el autodominio nos posibilita amar a pesar de cualquier cosa.